

Un duelo a priori muy atractivo entre dos equipos que optan seriamente a clasificarse para cuartos, siendo el Valencia probablemente uno de los “cocos” del torneo. El Mallorca encaró el partido demasiado encerrado atrás, respetando (¿o temiendo?) excesivamente a su rival; a la espera de cazar algún contragolpe con el potente delantero Alejandro Barroso (9), y sin embargo, dejando el juego a placer de los che, que hacían y deshacían a su antojo, con todo el tiempo del mundo para pensar. Con todos los futbolistas mallorquines en campo propio era muy difícil hacer algo fructífero (aunque sí que tuvo algún acercamiento peligroso vía contra). Brilló especialmente en los valencianistas Ferhat Cogalan (14), que con la calidad que tiene y todo el tiempo del mundo para pensar y ejecutar se sintió como pez en el agua, y de hecho fue el encargado de adelantar a los che gracias a un tremendo disparo desde fuera del área. A pesar del gol, el Mallorca no hizo ademán de adelantar líneas, por lo que la primera mitad fue muy cómoda para el bando valencianistas.
El juego cambió en la segunda mitad, con un Valencia adormilado y tocando improductivamente en campo propio, mientras el Mallorca (¡por fin!) se atrevió a adelantar líneas y presionar más arriba. Pudo empatar Alejandro Barroso (9) en un tremendo trallazo a saque de falta desde fuera del área. No fue así. Los mallorquines cada vez más cómodos se hicieron con el dominio del encuentro, y llegaron a la portería rival, mas no fue suficiente. En los instantes finales el Valencia recompuso un poco el ritmo aunque sin inquietar al Mallorca. Victoria por la mínima en un partido bastante aburrido, sin ritmo; por lo que no se cumplieron las expectativas.
Hoeman